La película Aquaman y el reino perdido, que representa el cierre de una etapa en el Universo Cinematográfico DC, ha encontrado una segunda oportunidad en el catálogo de Netflix España, donde ha escalado rápidamente al segundo lugar entre los títulos más populares. Este inesperado éxito en la plataforma de streaming contrasta con su desempeño en cines, donde no logró replicar el impacto de su predecesora, según reportó el medio especializado Sensacine.
De acuerdo con la información publicada por el medio, la secuela, dirigida nuevamente por James Wan y protagonizada por Jason Momoa, llegó a las salas de cine en diciembre de 2023, cinco años después del estreno de la primera entrega. Sin embargo, a pesar de contar con un presupuesto de 215 millones de dólares, recaudó solo 439 millones de dólares a nivel mundial, una cifra considerablemente inferior a los 1.148 millones de dólares que generó en 2018. Este resultado, aunque superior al de otras producciones recientes de DC, fue insuficiente para igualar el éxito de la primera película, que se mantiene como la más taquillera en la historia de la franquicia.
Un proyecto marcado por desafíos, la producción de Aquaman y el reino perdido estuvo plagada de complicaciones. Según se detalló, enfrentó múltiples retrasos y tuvo que realizar regrabaciones de varias escenas. Además, la participación de algunos actores fue reducida, lo que generó especulaciones sobre cambios en el guion y en la dirección creativa. A pesar de estos esfuerzos, la película no logró convencer a la crítica especializada, obteniendo solo un 33% de reseñas positivas en el sitio Rotten Tomatoes, un bajo porcentaje que refleja una recepción mayoritariamente negativa. Los comentarios señalaron problemas en la trama, en los personajes y un uso excesivo de efectos visuales. En una reseña, el crítico Alejandro G. Calvo calificó la película con 2,5 de 5 estrellas y destacó que “abusa del CGI hasta el punto de afectar la estética, lo que puede distraer al espectador”. También señaló que la película carece de profundidad y no aporta elementos significativos al género de superhéroes.
La trama de Aquaman y el reino perdido se centra en la venganza y en una alianza familiar, retomando eventos de la película anterior. En esta ocasión, el regreso de Black Manta, interpretado por Yahya Abdul-Mateen II, lo convierte en el principal antagonista, quien busca vengar la muerte de su padre utilizando un misterioso tridente negro, un artefacto que le otorga un poder formidable para intentar derrotar a Aquaman. Ante esta amenaza, el protagonista recurre a su hermano Orm, antiguo rey de Atlantis, interpretado por Patrick Wilson, quien debe formar una alianza para proteger a los habitantes del reino submarino. La dinámica entre los hermanos y su lucha contra un enemigo común son centrales en la narrativa, aunque las críticas apuntaron a que no lograron generar la carga emocional esperada.
A pesar de ello, el interés de los usuarios parece haber despertado, quienes consideran que la película ofrece un entretenimiento atractivo, independientemente de las opiniones de la crítica. Este fenómeno pone de manifiesto cómo las plataformas de streaming pueden ofrecer una oportunidad a producciones que no alcanzaron el éxito esperado en su lanzamiento inicial. Aunque Aquaman y el reino perdido no cumplió con las expectativas en taquilla ni en términos de crítica, su reciente popularidad demuestra que aún existe un público dispuesto a disfrutar de sus aventuras.
