Los precios de la bencina en el país han continuado su escalada en las últimas semanas, afectando sostenidamente el bolsillo de los automovilistas. Recientemente, el incremento de más de $30 por litro, ubicó a Chile como el segundo país con la gasolina más cara en Sudamérica, sólo superado por Uruguay.
Por su parte, la gasolina de 93 octanos, la más popular en el país, vio un incremento acumulado de $94 por litro, alcanzando niveles históricos de alza. En un contexto global de volatilidad en los precios del petróleo afectados por diversas dinámicas económicas y geopolíticas, los costos se ven afectados reflejándose en problemas de importación y distribución.
¿Dónde está la bencina más cara?
En el panorama regional, Chile se encuentra justo detrás de Uruguay en términos de precios elevados de combustible, seguido por Perú, Argentina y Brasil. En contraste, los precios más bajos de la región se encuentran en Venezuela, Bolivia y Ecuador, donde las diversas políticas han mantenido los costos relativamente más accesibles.
Por otro lado, diferentes iniciativas globales medioambientales han impactado en la distribución, sumado al creciente aumento de la movilidad eléctrica y otros métodos innovadores de gestión y reutilización de material en industrias como la minería, todo para contrarrestar los efectos nocivos del traslado y utilización de combustibles.
Estos aumentos ya expresan preocupación en la ciudadanía debido al impacto continuo del alza en el costo de vida y la movilidad, especialmente en sectores que dependen críticamente del transporte.