
El ministro de Bienes Nacionales, Francisco Figueroa, se pronunció sobre la controversia generada por la fallida adquisición de la casa de Salvador Allende, un hecho que resultó en la renuncia de su predecesora, Marcela Sandoval. Esta situación se complicó debido a que una de las herederas del inmueble es la ministra de Defensa, Maya Fernández, lo que suscitó cuestionamientos sobre la posible inconstitucionalidad de la operación. En este contexto, Figueroa, quien asumió el cargo hace menos de una semana, abordó el tema en una entrevista con Tele13 Radio, donde explicó que su primera acción fue solicitar “informes de todo lo que ha ocurrido”.
Investigación sobre la compra fallida
El ministro Francisco Figueroa se reunió con el subsecretario, quien es el jefe de Servicio, y le pidió que iniciara un procedimiento disciplinario para investigar los errores y la falta de diligencia en el proceso de compra. “Lo que corresponde es que…” fue la frase que utilizó para referirse a la necesidad de esclarecer los hechos.
En relación a la compra de la casa de Allende, Figueroa afirmó que la operación se detuvo en el momento adecuado, aunque consideró que podría haberse frenado mucho antes. Reconoció que se cometieron “desprolijidades” en el proceso y enfatizó que su interés radica en comprender cómo y dónde ocurrieron esos errores para evitar que se repitan en futuros procedimientos.
“Eso depende de la propia investigación, de lo que allí se levante. A mí lo que me importa es entender los procedimientos que se llevaron mal, para eventualmente corregir protocolos”, añadió el ministro.
Evaluación del proceso
Figueroa subrayó que este proceso debió ser evaluado en su totalidad dentro del Ministerio, hasta que se completara, y que esto corresponde a las autoridades en su nivel más político y directivo.
Respecto al contrato que se firmó para la compra, Figueroa aclaró que “no ha sido aprobado por este ministro, y por lo tanto no tiene ningún efecto jurídico”. Aseguró que no ha habido ningún pago relacionado con la operación, ya que los recursos destinados para ello permanecen en las cuentas fiscales.
“Mientras yo no apruebe esta compraventa, esta compraventa no existe y yo no la voy a aprobar”, concluyó el ministro de Bienes Nacionales.