Demencia frontotemporal: el diagnóstico que une a Bruce Willis y Edgardo Bauza en la lucha contra la enfermedad

Edgardo Bauza enfrenta la demencia frontotemporal
Edgardo Bauza enfrenta la demencia frontotemporal

Uno de los trastornos neurodegenerativos más complejos de diagnosticar y tratar es la demencia frontotemporal, una enfermedad que ha ganado notoriedad recientemente debido a que el actor Bruce Willis ha sido diagnosticado con esta condición. Además, se ha informado que el ex director técnico de la Selección Argentina y reconocido jugador de Rosario Central, Edgardo “El Patón” Bauza, también ha recibido el mismo diagnóstico. Esta forma de demencia afecta principalmente los lóbulos frontal y temporal del cerebro, que son regiones asociadas con la personalidad, la conducta y el lenguaje. Según la ciencia, aunque es menos común que otras formas de demencia como el Alzheimer, representa entre el 10% y el 20% de los casos y suele diagnosticarse en personas de entre 40 y 65 años.

El doctor Alejandro Andersson, neurólogo y director del Instituto de Neurología Buenos Aires (INBA), explicó a Infobae que “el deterioro de las funciones cognitivas es un aspecto central de esta enfermedad. Hay un grupo de demencias que se denominan corticales, que comienzan de manera focal y asimétrica, y son ocasionadas por la alteración de la proteína tau, que es un componente fundamental del esqueleto de las neuronas. La demencia frontotemporal entra dentro de esta categoría, comenzando con alteraciones que se manifiestan como cambios en la personalidad”. Este trastorno se caracteriza por la atrofia de las áreas cerebrales afectadas, lo que genera una variedad de signos y síntomas. Entre estos se incluyen la desinhibición, la apatía, la pérdida de empatía y comportamientos compulsivos, como comer en exceso o preferir alimentos dulces.

Desde el punto de vista del lenguaje, los pacientes pueden experimentar afasia progresiva, problemas semánticos y otros trastornos de la comunicación. “Las neuronas tienen un neuroesqueleto hecho de proteínas tau. Si esta proteína se altera, la neurona se desarma y muere”, detalla Andersson. Por su parte, el doctor Ricardo Allegri, jefe del área de Cognitiva en el Sanatorio Fleni, añade que “esta patología está subdiagnosticada. En muchos casos, el paciente no presenta problemas de memoria, que son comunes en otros tipos de demencia, lo que dificulta el diagnóstico. Lo más frecuente es la apatía y la desinhibición”. Este retraso en el diagnóstico puede deberse a la confusión con trastornos psiquiátricos como la depresión, el bipolarismo o el trastorno obsesivo-compulsivo.

El doctor Nahuel Magrath Guimet, médico especialista en Neuropsiquiatría en Fleni, sostiene que “la presencia de un traumatismo encéfalo craneano de forma repetida es uno de los pocos factores de riesgo conocidos para la demencia frontotemporal. Además, es importante diferenciarla de otra entidad muy parecida, que está frecuentemente asociada a traumatismos craneales, la encefalopatía traumática crónica, que sí está mucho más relacionada con los deportes”. El doctor Magrath también completó que, a pesar de los estudios realizados, donde se estudia retrospectivamente, se ha demostrado que el único factor aislado que se puede ver como predictivo para desarrollar esta condición es el traumatismo craneal repetido. Se cree que esto se debe a la acumulación de la proteína tau, que comparte características con la que se presenta en el Alzheimer.

Los síntomas variados de la demencia frontotemporal dificultan su identificación temprana. Los expertos coinciden en que los criterios clínicos incluyen la desinhibición conductual, la pérdida de empatía y la cognición social voraz. Además, se subraya que más de la mitad de los casos son confundidos con cuadros psiquiátricos, lo que retrasa el diagnóstico.

En cuanto al diagnóstico, no existe una prueba diagnóstica única. En la Clínica Mayo, los médicos se basan en el historial clínico del paciente, análisis de sangre, pruebas neuropsicológicas y estudios de imágenes cerebrales. La resonancia magnética y la tomografía por emisión de positrones son herramientas clave para identificar las áreas cerebrales afectadas y su metabolismo. En el caso de la resonancia, se utilizan ondas de radio y un fuerte campo magnético para producir imágenes detalladas del cerebro. En la tomografía, se inyecta un marcador radioactivo de bajo nivel en la sangre para ayudar a mostrar cómo se metabolizan los nutrientes en el cerebro y dónde ha ocurrido la degeneración asociada a este tipo de demencia. A veces, se evalúan ampliamente las habilidades de razonamiento y memoria, lo que es especialmente útil para determinar la etapa y el patrón de anomalías en los resultados, así como las causas, donde la genética juega un papel importante y se han identificado factores específicos.

“La causa de las mutaciones genéticas que comprometen la salud cerebral se conocen como taupatías, y hay familias con posibilidades de tenerla”, señala Andersson. Actualmente, no existe una cura, y los tratamientos disponibles se centran en aliviar y mejorar la calidad de vida del paciente. Se utilizan antidepresivos, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) y antipsicóticos para ayudar con el estado de ánimo, aunque deben administrarse con precaución debido a los posibles efectos secundarios. La terapia de habla puede ser beneficiosa para ayudar a los pacientes a enfrentar las dificultades, permitiéndoles desarrollar estrategias alternativas que no solo benefician al paciente, sino también a su entorno familiar y social. Esto genera desafíos significativos en el cuidado y manejo diario. Como concluye Andersson, “las personas afectadas que no pueden inhibir o controlar sus impulsos sufren cambios dramáticos en su personalidad y en sus relaciones sociales”. Aunque el conocimiento sobre la demencia frontotemporal ha avanzado, los expertos coinciden en la necesidad de realizar más investigaciones para comprender mejor los tratamientos efectivos. La combinación de diagnósticos tempranos, terapias personalizadas y apoyo es crucial para enfrentar los retos que plantea esta condición.