Milei celebra la victoria de Trump: ¿una alianza que beneficia a Argentina?

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El presidente argentino Javier Milei celebró con entusiasmo la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, un evento que podría reconfigurar las relaciones entre la Casa Blanca y Sudamérica, así como influir en la política global, incluyendo la guerra en Ucrania. La situación política actual muestra cómo los intereses pueden superar las diferencias ideológicas, como se evidencia en la relación entre Milei y Trump, a pesar de sus diferentes enfoques económicos.

La celebración de Milei por la victoria de Trump

Milei, quien es un declarado admirador de Trump, utilizó su cuenta de X para felicitar al magnate estadounidense, escribiendo: “@RealDonaldTrump, felicitaciones por tu formidable victoria electoral. Ahora, ‘Make America Great Again’. Sabes que puedes contar con Argentina para llevar a cabo tu tarea. Éxitos y bendiciones. Saludos cordiales”. Este mensaje fue publicado poco después de que se confirmara que Trump había superado los 270 votos del Colegio Electoral.

El presidente argentino también compartió una imagen generada por inteligencia artificial en la que aparece representado como un león, su alter ego, junto a Trump. Para añadir un toque cultural estadounidense, incluyó en sus historias de Instagram la canción “YMCA” de Village People.

La relación entre Milei y Trump

Milei se ha posicionado como un aliado estratégico de Trump en América Latina, adoptando un estilo discursivo similar y criticando el movimiento woke, al igual que otros líderes de la derecha, como Giorgia Meloni de Italia. Desde diciembre de 2023, el presidente argentino ha realizado 14 viajes al exterior, de los cuales casi la mitad han sido a Estados Unidos, buscando establecer una relación sólida con la administración estadounidense.

Su alineación con Estados Unidos es total, así como con Israel, otro país que se beneficiará de la reelección de Trump. Esta alineación se ha manifestado en la reciente destitución de Diana Mondino, la canciller argentina, quien fue removida de su cargo tras votar en contra del embargo económico de EE.UU. a Cuba. Su reemplazo es Gerardo Werthein, quien era embajador argentino en Washington y es considerado un hombre de confianza de los hermanos Milei.

El contexto económico y político

La relación entre Argentina y Estados Unidos se asemeja a la del menemismo de los años 90, en un momento en que Argentina busca resolver su situación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para avanzar en su plan económico. Sin embargo, la política de Trump podría no ser del todo beneficiosa para Milei, ya que un dólar más fuerte podría debilitar monedas emergentes como el peso argentino y aumentar los aranceles a la importación.

A pesar de estas complicaciones, los activos argentinos han mostrado una reacción positiva. La alianza entre Milei y Trump se extiende también a Elon Musk, quien actúa como un nexo entre ambos líderes conservadores. En la región, Milei enfrenta la oposición de figuras como Lula da Silva de Brasil, Gustavo Petro y Claudia Sheinbaum de México, y Gabriel Boric de Chile.

Las expectativas de la nueva administración de Trump

El nuevo canciller Werthein ha expresado que Argentina y Estados Unidos trabajarán juntos para promover “las ideas de la libertad”, afirmando que “uno nunca va a ser libre si tiene déficit. Es un pilar para que los países puedan ser libres”. Las expectativas sobre la administración de Trump son altas, y se espera que en enero se conozca quién será el nuevo secretario del Tesoro y el representante de EE.UU. en el FMI.

Milei tiene planes de viajar a EE.UU. en los próximos días para reunirse con Trump en Mar-a-Lago, Florida, donde participará en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) como orador. Se anticipa que también estarán presentes Elon Musk y el senador J.D. Vance, quien será el futuro vicepresidente.

La relación de Trump con otros líderes internacionales

En el ámbito internacional, Trump ha mantenido relaciones con líderes nacionalistas, aunque sus visiones económicas pueden diferir. Por ejemplo, el presidente ruso Vladimir Putin ha tenido una relación cercana con Trump desde su primer mandato, aunque no ha expresado apoyo explícito por él. Trump ha insinuado la posibilidad de que podría abandonar la OTAN para facilitar un acuerdo entre Europa y Rusia sobre Ucrania, lo que podría incluir un alto al fuego que favorezca a Putin.

En cuanto a Oriente Próximo, Trump ha sido un firme defensor de Israel, lo que es bien recibido por el primer ministro Benjamin Netanyahu. Trump ha tomado decisiones que han beneficiado a Israel, como la suspensión de ayuda a la agencia de la ONU para refugiados palestinos y el cierre de la oficina de la OLP en Washington. Netanyahu ha expresado su entusiasmo por el regreso de Trump, afirmando que “Tu histórico regreso a la Casa Blanca ofrece un nuevo comienzo a Estados Unidos y una vuelta al compromiso con la gran alianza entre Israel y Estados Unidos. ¡Es una gran victoria!”

Trump, en su primer discurso tras la victoria, declaró: “No queremos guerras. Yo no voy a empezar una guerra, yo las voy a detener”, lo que añade un nuevo nivel de expectativa sobre su política exterior en su segundo mandato.