
Aumento significativo de complots terroristas en el Reino Unido vinculado a la influencia de Irán y Rusia, según el director del MI5.
El Reino Unido está experimentando un notable incremento en los intentos de asesinato, sabotaje y otros delitos en su territorio, atribuibles a las acciones de Irán y Rusia. Esta información fue proporcionada el martes por Ken McCallum, director general del MI5, la agencia de inteligencia nacional británica. McCallum indicó que sus agentes han intervenido en 20 complots que podrían haber tenido consecuencias letales desde el año 2022, y advirtió que estos ataques podrían expandirse si se intensifican los conflictos en el Medio Oriente.
Hasta el momento, las amenazas han estado dirigidas principalmente contra iraníes en el extranjero, pero McCallum subrayó que existe un riesgo de “un aumento -o ampliación- de la agresión estatal iraní en el Reino Unido” a medida que la crisis en Oriente Medio se agrava y tras los recientes ataques a gran escala de Israel en respuesta a los lanzamientos de misiles iraníes.
En un discurso poco común en público, McCallum expuso que las amenazas provienen de diversos grupos, incluidos militantes y personas radicalizadas, así como del grupo Estado Islámico, que ha resurgido. Este contexto ha creado “el entorno más complejo e interconectado que hemos visto jamás”. También mencionó que militantes de Hamas en Gaza, Hezbollah en Líbano y los rebeldes hutíes en Yemen podrían desencadenar ataques en el Reino Unido, aunque hasta ahora no se ha traducido en “una escala de violencia terrorista” en el país.
El número de investigaciones llevadas a cabo por el MI5 ha aumentado un 48% en el último año, siendo Irán y China identificados como responsables. Este incremento se ha visto influenciado por la muerte de Mahsa Amini, quien falleció bajo custodia policial en septiembre tras ser detenida por supuestamente violar la ley del velo obligatorio en la República Islámica. McCallum afirmó que “hemos visto complots aquí a un ritmo sin precedentes”. Desde enero de 2022, el MI5 ha respondido a complots potencialmente letales, lo que representa un tercio de la cifra total de 15 que el Gobierno reportó a finales de enero.
El director del MI5 también mencionó que los actores estatales están utilizando “incendios provocados y sabotajes” para generar “caos” en las calles de varios países europeos. Tanto Irán como Rusia recurren a delincuentes, que van desde narcotraficantes internacionales hasta ladrones de poca monta, para llevar a cabo estas acciones ilegales. Varios de estos presuntos delincuentes han enfrentado acusaciones penales. En diciembre, un checheno fue encarcelado por su reconocimiento de oficinas de una emisora disidente, mientras que varios sospechosos están a la espera de juicio en Londres por un presunto plan vinculado a un ataque contra empresas de propiedad ucraniana.
Es importante señalar que tanto Moscú como Teherán están bajo la lupa. En Alemania, se han detenido a varias personas por espionaje o planificación de atentados en nombre de Rusia. En mayo, las autoridades de seguridad interior de Suecia acusaron a individuos de utilizar redes de intereses israelíes en el país escandinavo. En discursos anteriores, los jefes de los servicios de inteligencia han enfatizado el comportamiento cada vez más asertivo de estos estados, calificándolo como un “mayor desafío estratégico”. McCallum también destacó la importancia de la relación económica con China, aunque advirtió sobre los “riesgos que hay que gestionar”.
El nivel oficial de amenaza terrorista en el Reino Unido se sitúa en “sustancial”, lo que implica que es probable que ocurran ataques. Desde 2017, se han desbaratado 43 complots en fase avanzada, lo que ha salvado “numerosas vidas”. Aunque alrededor del 75% de las amenazas provienen de ideologías extremistas islámicas, un 25% se atribuye a la extrema derecha. Sin embargo, McCallum advirtió que estas etiquetas “no reflejan completamente la vertiginosa gama de creencias e ideologías que vemos”, que son alimentadas por una “sopa de odio en línea, teorías conspirativas y desinformación”.
Los jóvenes también están involucrados en estos complots, con un 13% de los sujetos terroristas siendo menores de 18 años. Además, hay signos preocupantes de que el Estado Islámico está intentando reactivarse, a pesar de la caída de su autoproclamado califato en Irak y Siria. McCallum citó un ataque en marzo que resultó en la muerte de 140 personas en una sala de conciertos, reivindicado por el Estado Islámico, como “una demostración brutal de su capacidad”.
El MI5 ha enfrentado críticas por su incapacidad para detener ataques mortales, incluido el atentado suicida en 2017 durante un concierto de Ariana Grande en Manchester, que dejó 22 muertos. McCallum reflexionó sobre su carrera, señalando que “los primeros años estuvieron llenos de terroristas”, y ahora el Reino Unido se enfrenta a un contexto de asesinato estatal en medio de un conflicto terrestre en Europa. “Tiene las manos infernales”, concluyó.