El ministro de Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, anunció la detención del gendarme argentino Nahuel Agustín Gallo, quien fue arrestado el pasado 8 de diciembre, según información proporcionada por el Gobierno de Javier Milei. Cabello, quien es considerado la mano derecha de Nicolás Maduro, indicó que Gallo llegó al país caribeño con el propósito de “cumplir una misión”, aunque no ofreció detalles específicos sobre la naturaleza de dicha misión. Sin embargo, aseguró que se proporcionará información sobre el caso en un futuro cercano.
Durante una rueda de prensa del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), transmitida por el canal estatal VTV, Cabello cuestionó la situación del gendarme argentino, señalando: “Tú te metes en su Instagram y le da la vuelta al mundo, viaja por todo el mundo, pero su sueldo es de 500 dólares. ¿Cómo lo logra? ¿Qué venía a hacer a Venezuela? ¿Cuál era su tarea en Venezuela? Eso no lo dicen”.
El ministro también afirmó que la supuesta misión que Gallo iba a llevar a cabo no ha sido abortada, aunque destacó que los organismos de seguridad del país han dado “un golpe duro” al respecto, sin proporcionar más información sobre el asunto. Cabello enfatizó: “Les dolió porque venía a cumplir una misión y no es que ha sido abortada la misión, les hemos dado un golpe duro gracias a los organismos de Seguridad del Estado”.
Además, el primer vicepresidente del PSUV mencionó que en Venezuela “entran personas todos los días de distintas partes del mundo” con fines turísticos. Sin embargo, advirtió que “el que viene a conspirar que asuma su responsabilidad”, aunque no se refirió directamente a Gallo.
Las autoridades argentinas han informado que Gallo ingresó a Venezuela desde Colombia, utilizando un paso fronterizo terrestre y cruzando el Puente Internacional Francisco de Paula Santander. Su entrada al país tenía como único propósito visitar a su familia y a su pareja, con quien tiene un hijo en común. La pareja de Gallo, María Gómez, de nacionalidad venezolana y residente en Argentina desde hace seis años, declaró que el gendarme fue trasladado en una “camioneta negra” por la Dirección General de Contrainteligencia Militar de Venezuela (DGCIM).
Las autoridades argentinas han indicado que Gallo ha sido acusado de espionaje por el régimen de Maduro, y se encuentra incomunicado y trasladado a un centro de inteligencia. En respuesta a la detención, el Gobierno de Milei ha manifestado su intención de solicitar la colaboración de Francia para mediar en la liberación del gendarme argentino. Sin embargo, desde el gobierno argentino se ha advertido que “mucho no se puede hacer, tenemos las manos atadas”, según lo revelado por un funcionario a la Agencia Noticias Argentinas, quien añadió: “no podemos iniciar una guerra contra Venezuela”, según lo reportado por el medio asociado Perfil.
