Aumento de jóvenes que no tienen actividad sexual plantea interrogantes sobre cambios culturales y sociales recientes

La creciente abstinencia sexual en jóvenes: efectos en salud y bienestar.
La creciente abstinencia sexual en jóvenes: efectos en salud y bienestar.

Un artículo reciente del Instituto para Estudios Familiares de Estados Unidos destaca un fenómeno que contrasta con las creencias comunes sobre la sexualidad juvenil. Según este estudio, en las últimas décadas, el comportamiento sexual de los adultos jóvenes ha experimentado cambios significativos. En una población de entre 22 y 34 años, se ha observado un aumento considerable en el número de personas que reportan no haber tenido actividad sexual en el último año. Este hallazgo sugiere un giro notable en las normas sociales y culturales relacionadas con el sexo y las relaciones íntimas en comparación con décadas pasadas, y plantea interrogantes más profundos sobre las causas subyacentes y sus posibles repercusiones.

Recesión sexual y datos relevantes

El artículo menciona que este fenómeno se alinea con observaciones previas sobre lo que se ha denominado “recesión sexual”. Una encuesta citada por la BBC en 2019 reveló que el 23% de los encuestados reportó no haber tenido relaciones sexuales en los últimos doce meses, lo que representa un incremento en comparación con años anteriores.

Datos recopilados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) a través de la Encuesta Nacional de Crecimiento Familiar muestran un aumento dramático en la abstinencia tanto de hombres como de mujeres jóvenes. Entre 2008 y 2021, el porcentaje de hombres que informaron no haber tenido actividad sexual aumentó del 10% al 24%, mientras que en las mujeres el incremento fue del 8% al 13%. Además, la proporción de jóvenes que no tuvieron relaciones sexuales en un periodo de tres meses subió del 20% al 35% en mujeres y del 21% al 31% en hombres. Estos números reflejan las dinámicas culturales y personales de las generaciones actuales.

Factores que influyen en la disminución de la actividad sexual

Se postulan diversos factores que podrían estar influyendo en este declive de la actividad sexual entre los adultos jóvenes. Algunos de estos factores incluyen:

  • Retrasos en el establecimiento de relaciones estables: Muchos jóvenes están retrasando el matrimonio y las relaciones a largo plazo.
  • Factores económicos: La inestabilidad económica puede afectar la capacidad de los jóvenes para formar relaciones estables.
  • La tecnología digital: El uso de aplicaciones de citas y redes sociales ha cambiado la forma en que los jóvenes se relacionan.
  • Cambios en los paradigmas sociales: La aceptación de diferentes estilos de vida y orientaciones sexuales ha transformado las expectativas sobre las relaciones.
  • Incels (celibato involuntario): Un fenómeno social que ha ganado atención, donde algunos hombres se sienten incapaces de establecer relaciones románticas o sexuales.
  • Estrés y salud mental: La ansiedad y otros problemas de salud mental pueden influir en la vida sexual de los jóvenes.
  • Consumo de pornografía: El acceso fácil a la pornografía puede afectar las expectativas y comportamientos sexuales.
  • Estilos de vida: Cambios en los estilos de vida, como el aumento del tiempo dedicado al trabajo o al ocio digital, pueden reducir las oportunidades de interacción social.

Implicaciones sociales y culturales

Las implicancias de esta tendencia no solo afectan a los individuos, sino que también tienen consecuencias amplias para la sociedad. Entre estas se incluyen:

  • Salud mental y emocional: El aumento de la soledad y la ansiedad puede estar relacionado con la disminución de la actividad sexual.
  • Impacto demográfico: Cambios en la actividad sexual pueden influir en las tasas de natalidad y en la estructura demográfica de la población.
  • Transformaciones interpersonales: La forma en que los jóvenes se relacionan entre sí está cambiando, lo que puede afectar la dinámica social.
  • Percepción de los medios: La representación de la sexualidad en los medios puede influir en las expectativas y comportamientos de los jóvenes.

El doctor Enrique De Rosa Alabaster, quien se especializa en temas de salud mental, es médico psiquiatra, neurólogo y sexólogo legista. Su trabajo se centra en comprender las complejidades de la sexualidad y la salud mental en la sociedad contemporánea.