
Recientemente, en un programa de televisión en vivo, se confirmó nuevamente el romance entre el ex seleccionado nacional chileno, Mauricio Pinilla, y su exesposa Giselle Reyes.
Detalles del proceso de terapia
En una conversación con LUN, la panelista de farándula, Giselle Reyes, reveló más información sobre el extenso proceso de terapia al que se ha sometido Mauricio Pinilla para controlar sus adicciones. Este proceso ha sido fundamental para la recuperación de su relación tras cuatro años de separación.
Giselle comentó: “Estamos viviendo este proceso desde que Mauricio empezó su tratamiento, desde noviembre del año antepasado. Ahí, netamente, fui como espectadora, pero igual teníamos sesiones en conjunto con los niños. He estado siempre desde el minuto uno, porque fui una de las personas a la que Mauricio le pidió que lo ayudara”.
Motivaciones detrás de la terapia
La razón principal de la terapia, según Giselle, no era necesariamente la reconciliación, sino la mejora personal de Pinilla. Ella expresó: “Yo quería que sanáramos todos los temas que teníamos pendientes y sobre todo que el día mañana hubiésemos tenido una buena relación por los niños si cada uno hubiese seguido su propio camino. Que no quedaran temas sin resolver”.
Compromiso y voluntad de cambio
Giselle Reyes también destacó la notable fuerza de voluntad y el compromiso que ha mostrado Mauricio Pinilla en su tratamiento. “Ha sido admirable que Mauricio sea tan constante y esté tan comprometido con su tratamiento, porque creo que él de verdad se está dando cuenta de que en muchas cosas no estaba bien”, afirmó.
Continuó diciendo: “Cuando una persona quiere mejorar muchas cosas, madurar y crecer, esa es la clave para las personas que quieren mejorarse. Entonces la clave es el amor y creer en Mauricio. Nunca dejamos de querernos”.
Perspectivas sobre el futuro
En cuanto a su situación actual, Giselle mencionó: “Siempre he sido una fiel creyente de que las cosas duran lo que tienen que durar, que las cosas funcionan cuando tienen que funcionar y de que la gente sí puede cambiar. Voy a poner todo lo que yo pueda, Mauricio está poniendo todo también y si funciona bien y si no, quedaremos tan amigos como siempre”.
Este relato pone de manifiesto el proceso de sanación y la búsqueda de una relación más saludable entre Mauricio Pinilla y Giselle Reyes, en el contexto de su historia personal y familiar.