Luego de la autoproclamación de Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, y en medio de protestas contra Nicolás Madura que han dejado al menos 12 muertos, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, dijo que los militares no aceptarán “a un presidente impuesto a la sombra de oscuros intereses”.

“El desespero y la intolerancia atentan contra la paz de la nación. Los soldados de la Patria no aceptamos a un presidente impuesto a la sombra de oscuros intereses ni autoproclamado al margen de la ley”, dijo el funcionario en su cuenta de Twitter.

En tanto, Juan Guaidó, quien ha llamado a desconocer a Maduro, aseguró que el mensaje del Parlamento está teniendo “eco” en la Fuerza Armada, considerado el sostén del gobierno.

Abogando por quebrar el decisivo apoyo de la Fuerza Armada que tiene Maduro, el Parlamento se comprometió hace una semana a “decretar una ley de amnistía” para “funcionarios civiles o militares” que lo desconozcan y cooperen con el “gobierno de transición”.

La Fuerza Armada, integrada por unos 365.000 efectivos y 1,6 millones de milicianos civiles, reafirmó su lealtad “absoluta” a Maduro tras la investidura.

Pese al empeño por mostrarse monolítica, dos generales figuran entre los detenidos por un presunto atentado contra el mandatario el 4 de agosto, cuando dos drones cargados de explosivos estallaron cerca de una tarima donde encabezaba un acto militar.