
La publicidad de productos de tabaco ha estado históricamente ligada a la seducción y la confianza, presentando a personas fumando en situaciones que refuerzan la idea de que el cigarrillo mejora el atractivo personal. Frases como “Para hombres que piensan en grande” o “Suave amor” han sido parte de campañas que asocian el consumo de cigarrillos con la seducción. En la actualidad, aunque las tácticas de la industria han cambiado, el mensaje subyacente sigue siendo el mismo. Los productos de tabaco electrónicos y otros que contienen nicotina se presentan como accesorios de moda, con diseños modernos y estrategias de marketing dirigidas a un público más joven. Sin embargo, la investigación científica ha demostrado que el tabaquismo impacta negativamente en la salud sexual y reproductiva.
Impacto del tabaquismo en la salud sexual
La organización sin fines de lucro Truth Initiative, dedicada a la lucha contra la adicción al tabaco en adultos en Estados Unidos, ha alertado sobre tres efectos negativos del tabaquismo en la salud sexual: menor deseo sexual, disfunción eréctil e infertilidad.
Menor deseo sexual
Un estudio publicado en la revista BJU International analizó datos de 6,754 hombres de entre 50 y 75 años, encontrando que los fumadores tenían un mayor riesgo de padecer baja libido en comparación con los no fumadores. Esta relación involucra tanto factores físicos como psicológicos. La nicotina, presente en los productos de tabaco, deprime el sistema nervioso central, lo que reduce la respuesta a estímulos placenteros. Además, se ha asociado con niveles altos de ansiedad y estrés, lo que puede disminuir el interés en la actividad sexual.
Disfunción eréctil
La disfunción eréctil se define como la incapacidad persistente para lograr o mantener una erección suficiente para una relación sexual satisfactoria. Esta condición puede ser causada por diversos factores, y varios estudios han demostrado que fumar aumenta el riesgo de desarrollarla. Uno de estos estudios, publicado en la revista Andrologia, reveló que la disponibilidad de óxido nítrico, un compuesto esencial para la relajación de los vasos sanguíneos del pene, es un “factor independiente en el desarrollo de la disfunción eréctil”. Según Jason Kovac, urólogo e investigador especializado en medicina masculina del Colegio de Medicina Baylor, aquellos que fuman 20 cigarrillos al día tienen el doble de probabilidades de sufrir disfunción eréctil severa en comparación con quienes no fuman.
Infertilidad
Múltiples estudios epidemiológicos realizados en China y Europa han encontrado que los fumadores tienen entre 1.4 y 3.1 veces más probabilidades de desarrollar daños en los espermatozoides y óvulos, lo que puede llevar a la infertilidad, definida como la imposibilidad de conseguir un embarazo tras un año (o más) de relaciones sexuales sin protección. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han advertido que fumar puede causar problemas de fertilidad, dificultando que las mujeres (según su sexo biológico) queden embarazadas y aumentando la probabilidad de que nunca lo consigan. Fumar también daña los espermatozoides, y se estima que el 13% de los casos de infertilidad diagnosticados están relacionados con el consumo de tabaco, según Sandra Braun, médica especialista interna del Hospital Clínicas “José San Martín” de la Universidad de Buenos Aires.
Consecuencias en la salud fetal
La exposición al humo de tabaco, tanto en fumadores como en aquellos que están cerca de ellos, puede afectar la fertilidad y la salud de los descendientes. Guillermo Espinosa, jefe del Grupo Antitabaco Italiano, señala que entre los impactos asociados se encuentran el menor crecimiento fetal y la disminución del peso al nacer. Además, se ha indicado que el consumo de tabaco durante el embarazo puede provocar sobrepeso u obesidad y un aumento rápido en la infancia, lo que puede llevar a problemas de salud como enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2 en la adultez temprana.
Cómo dejar de fumar
Abandonar el tabaquismo es posible con el apoyo adecuado. Espinosa menciona que los riesgos del tabaquismo son generalmente conocidos por la mayoría de las parejas fumadoras. Las parejas pueden consultar a profesionales especializados en cesación tabáquica, quienes pueden acompañarlos si desean hacer un intento serio por dejar de fumar o brindar información sobre los riesgos que corren al consumir nicotina. Existen pruebas que indican que dejar de fumar antes de los 50 años puede ayudar a recuperar la función eréctil. En un grupo de 143 hombres con disfunción eréctil, el 50% reportó mejoras después de seis meses de haber dejado de fumar.
La doctora Braun sugiere que los pacientes deberían tener en cuenta que los efectos asociados al tabaquismo pueden revertirse. Se recomienda llevar un registro diario y utilizar alguna aplicación que ayude en el proceso de dejar de fumar. También es importante consultar para evaluar qué tratamiento corresponde a la situación de cada paciente. Los métodos para dejar de fumar incluyen terapia de reemplazo, asesoramiento profesional y el uso de aplicaciones diseñadas para ayudar en el proceso. El primer paso es fijar una fecha para abandonar el hábito y buscar apoyo en el entorno cercano.