
La CEO y fundadora de BondUp, Michelle Schnitzer, ha compartido su perspectiva sobre el perfil de los chilenos de 60 años o más, destacando su activa participación en la vida familiar y social. Según Schnitzer, “Hoy día una persona de 60 a 65 años se hace cargo de sus papás, que tienen más de 90 años, se hace cargo de sus hijos y de sus nietos. Esa generación es muchísimo más activa de lo que nosotros pensamos o imaginamos”. Además, enfatiza que estos adultos mayores “tienen todas las ganas de seguir trabajando, aportando al mundo, enseñando”, lo que observa diariamente en la comunidad de BondUp.
Percepciones erróneas sobre la vejez
Schnitzer señala que las barreras que enfrentan los adultos mayores para cumplir sus metas están relacionadas con una percepción equivocada de la sociedad sobre la vejez. Esta percepción errónea, que asocia la edad con la inactividad, limita tanto a las personas mayores como a la sociedad en general. “Esos paradigmas de que por tener 65 o 70 años ya están viejos. Entonces empiezan a poner limitaciones que finalmente están en su mente”, explica.
La diferencia en la situación de las mujeres mayores es notable, ya que muchas de ellas han pasado de ser amas de casa a ser trabajadoras con estudios y mayor independencia económica. Sin embargo, la imagen tradicional del “abuelito” sigue prevaleciendo, lo que contribuye a su aislamiento y discriminación. Schnitzer argumenta que si la sociedad pudiera ver a los mayores con admiración y respeto, estos podrían sentirse más seguros y motivados para seguir contribuyendo.
Desafíos en el mercado laboral
En cuanto al mercado laboral, Schnitzer menciona que en Chile, al igual que en muchos otros países, los adultos mayores no son vistos como una oportunidad. Existen creencias sobre una brecha digital y una falta de flexibilidad en su forma de trabajar. “Las empresas en general no saben cómo manejarlo. También porque no conocen a este segmento”, afirma.
Se prevé que para el año 2030, el 40% de la población en Chile tendrá más de 50 años, lo que obligará a las empresas a reconsiderar su enfoque hacia la contratación de mayores. La baja natalidad también influye en esta situación, ya que habrá menos jóvenes disponibles para el mercado laboral.
La economía plateada
La economía plateada, que se refiere al mercado dirigido a las personas mayores, está ganando reconocimiento a nivel mundial. Schnitzer destaca que esta economía está valorada como la tercera más grande del mundo, después de Estados Unidos y China. Las personas mayores, que suelen tener más recursos y tiempo, están comenzando a ser un foco de atención para las empresas. En Estados Unidos, este segmento controla el 80% de la riqueza, mientras que en España alcanza el 65%.
Las empresas de turismo en España, por ejemplo, están enfocándose en la generación plateada, ya que los mayores son los que más gastan en viajes y experiencias. Sin embargo, en Chile, la publicidad y el marketing no suelen incluir a personas mayores, lo que refleja una falta de atención hacia este grupo demográfico.
Interacción intergeneracional
La intergeneracionalidad es un aspecto importante en la vida social de los adultos mayores. En países como España, es común ver a personas de diferentes edades compartiendo espacios y actividades. Schnitzer menciona que hay iniciativas en las que se aprovecha el talento de los mayores para capacitar a los jóvenes en las empresas. En contraste, en Chile, las personas mayores a menudo no tienen un lugar donde se sientan bienvenidos.
La soledad es otro tema crítico que afecta a los adultos mayores. Con el aumento de la esperanza de vida y la disminución de la tasa de natalidad, muchos mayores se encuentran solos, especialmente después de la jubilación. Este aislamiento puede llevar a un deterioro físico y mental, y se ha observado que la soledad está relacionada con altas tasas de suicidio en este grupo.
Historias de vida
Sara del Campo, de 62 años, trabaja en la Mutual de Seguridad y ha encontrado en BondUp una forma de ampliar su círculo social. “Realmente me ha hecho súper bien, tengo que reconocerlo”, dice, destacando que a esta edad siente que puede contribuir a la sociedad con su experiencia y alegría.
Por otro lado, María Paz Jarpa, de 67 años, realiza trabajo voluntario impartiendo talleres de tejido a mujeres en la Penitenciaría de Mujeres. Ella considera que su labor es significativa, ya que ayuda a estas mujeres a sentirse vistas y valoradas. Jarpa también se unió a BondUp para conocer gente y participar en actividades, enfatizando que la socialización es crucial para la salud mental de las personas mayores.
Ambas historias reflejan la importancia de la actividad social y laboral para los adultos mayores, así como los desafíos que enfrentan en un entorno que a menudo no les brinda el apoyo necesario.