
Los cortes de luz son una situación común en muchas regiones, especialmente durante temporadas de tormentas o en zonas con infraestructuras eléctricas inestables. Esta problemática genera inconvenientes para la vida diaria y puede causar daños significativos a los electrodomésticos del hogar, en particular a la nevera o refrigerador. Este aparato es uno de los más susceptibles a problemas debido a su funcionamiento continuo y la sensibilidad de sus componentes eléctricos. Por esta razón, la desconexión de la nevera en caso de un apagón es una medida preventiva que ayuda a evitar costosas reparaciones y protege el circuito eléctrico del hogar.
Vulnerabilidad de la nevera ante cortes de luz
Los cortes de luz están diseñados para funcionar de manera constante, manteniendo una temperatura estable en su interior. Sin embargo, la energía eléctrica puede generar picos de tensión al momento de restablecer el servicio, lo que puede afectar componentes clave como el compresor y la tarjeta electrónica. Estos picos son peligrosos, ya que pueden provocar cortocircuitos que dañen los sistemas internos de la nevera. Las partes dañadas pueden superar el 30% del precio total de una nueva unidad.
Riesgos de no desconectar la nevera
Si no se desconecta la nevera durante un pico de tensión, el riesgo de daño aumenta considerablemente. Además del compresor, otros elementos como el termostato y los fusibles también pueden verse comprometidos. Varios estudios han señalado que, si permanecen conectadas durante prolongados cortes de luz, las neveras tienen un 40% de probabilidad de sufrir averías. Esto se debe a la dependencia del motor y la electrónica para el enfriamiento de los alimentos.
Cómo desconectar la nevera de forma segura
Para desconectar la nevera de manera segura, se debe retirar el enchufe directamente de la toma de corriente en cuanto ocurra un apagón. Es importante evitar el uso de extensiones o enchufes múltiples, ya que estos pueden aumentar la posibilidad de fallos. Además, se recomienda esperar unos 10 a 15 minutos antes de volver a enchufarla, permitiendo que el sistema eléctrico del hogar se estabilice. En caso de apagones prolongados, es necesario dejar la puerta de la nevera cerrada para conservar los alimentos el máximo tiempo posible.
Medidas adicionales para proteger la nevera
En áreas donde los apagones son frecuentes, se sugiere instalar un protector de voltaje, un dispositivo que regula el flujo de electricidad y evita que afecten los componentes internos de la nevera. Otra medida útil es revisar periódicamente el estado de los cables conectados. Una instalación eléctrica en buen estado puede disminuir el impacto de los cortes de luz y reducir las fallas.
Qué hacer si la nevera presenta problemas tras un corte de luz
Si la nevera no funciona después de que se restablece la luz, es fundamental no intentar repararla de manera casera, ya que esto podría agravar el problema. Lo ideal es contactar a un técnico especializado que evalúe y determine si es necesario reparar o reemplazar alguna pieza. Algunas pólizas de seguro cubren daños eléctricos ocasionados por cortes de luz, por lo que es recomendable verificar qué tipo de contingencias están incluidas en la cobertura. Documentar los daños con fotos puede facilitar la gestión del reclamo.