Padres enfrentan desafíos para identificar enfermedades mentales en niños, afectando acceso a tratamientos necesarios

Explora cómo identificar y tratar trastornos de salud mental en niños.
Explora cómo identificar y tratar trastornos de salud mental en niños.

La identificación de enfermedades mentales en niños puede ser un desafío tanto para padres como para cuidadores. Comprender las señales de advertencia de estos trastornos es esencial para proporcionar la ayuda necesaria a los menores que podrían beneficiarse de un tratamiento adecuado.

¿Qué es una enfermedad mental?

La salud mental se refiere al bienestar general de una persona, abarcando aspectos como la forma en que piensas, controlas tus sentimientos y te comportas. Una enfermedad mental, también conocida como trastorno mental, implica patrones o cambios en el pensamiento y el comportamiento que pueden causar aflicción y dificultar el desempeño en la vida diaria. Estos trastornos suelen definirse como retrasos en el comportamiento, habilidades sociales y control de emociones, lo que puede llevar a que los niños sufran y no se comporten adecuadamente en casa, en la escuela o en otros entornos sociales.

Obstáculos en la detección durante la infancia

Detectar problemas de salud mental en los niños puede ser complicado, ya que el crecimiento es un proceso normal que implica cambios constantes. Además, los síntomas de una afección pueden variar según la edad del niño. Es posible que los más pequeños no puedan expresar cómo se sienten o explicar por qué se comportan de cierta manera. Las preocupaciones sobre la salud mental pueden impedir que los padres busquen atención médica, debido a factores como el estigma asociado a los trastornos mentales, el uso de medicamentos y el costo de obtener tratamiento.

Trastornos mentales comunes en niños

Entre los trastornos mentales más comunes en la infancia se encuentran:

  • Trastorno de ansiedad: Se caracteriza por miedos intensos y difíciles de controlar.
  • Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH): Implica dificultades para prestar atención y controlar impulsos.
  • Trastorno del espectro autista: Puede manifestarse antes de los tres años y afecta la comunicación y el comportamiento.
  • Trastornos alimentarios: Incluyen enfoques poco saludables hacia el cuerpo ideal y hábitos alimenticios riesgosos.
  • Depresión: Se presenta como un estado de ánimo persistente de tristeza, irritabilidad y desánimo, así como pérdida de interés en actividades.
  • Estrés postraumático: Surge como un disgusto emocional tras experiencias de violencia, abuso, lesiones o traumas.
  • Esquizofrenia: Puede aparecer en la adolescencia y se caracteriza por percepciones distorsionadas y pérdida de contacto con la realidad.

Signos de alerta en los niños

Algunos signos que pueden indicar que un niño está experimentando problemas de salud mental incluyen cambios en el comportamiento, dificultades en la escuela, problemas para relacionarse con otros y cambios en el estado de ánimo. Si un padre o cuidador sospecha que su hijo puede tener un trastorno mental, es recomendable hablar con un médico. Es importante describir los comportamientos preocupantes y consultar a profesores, amigos cercanos y familiares para obtener una visión más completa de la situación.

Diagnóstico y tratamiento de trastornos mentales

Los profesionales de la salud mental utilizan diversas herramientas para diagnosticar y tratar afecciones que afectan la vida diaria de los niños. Para el diagnóstico, se sugiere consultar a un especialista, que puede ser un psiquiatra, psicólogo, trabajador social clínico o un miembro del personal de enfermería especializado en psiquiatría. Entre los recursos utilizados se encuentra el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría, que ofrece criterios para clasificar síntomas. También se utiliza la Clasificación Internacional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud.

Opciones de tratamiento

Los tratamientos para los trastornos mentales en niños pueden incluir:

  • Psicoterapia: Terapia conversacional y juegos que ayudan a los niños a aprender a hablar sobre sus problemas y a manejarlos.
  • Medicamentos: Pueden incluir estimulantes, antidepresivos, ansiolíticos, antipsicóticos y estabilizadores del ánimo, que ayudan a los niños a lidiar con sus síntomas.

El apoyo de los padres es fundamental en el plan de tratamiento del niño. Es importante que los padres se cuiden a sí mismos, se informen sobre la salud mental y busquen asesoramiento familiar que les ayude a responder a las necesidades de sus hijos. Participar en programas de capacitación puede ser beneficioso para aprender a manejar situaciones difíciles y fomentar un ambiente de calma y diversión en el hogar.