En una semana marcada por la controversia en el mundo del rugby, Joe Marler, pilar de la selección inglesa, ha captado la atención mediática debido a sus declaraciones sobre el haka, la tradicional danza maorí que el equipo de Nueva Zelanda realiza antes de cada partido. A pocos días de que Inglaterra se enfrente a Nueva Zelanda en Twickenham, Marler generó un gran revuelo al criticar de manera contundente esta emblemática ceremonia cultural, sugiriendo que debería ser eliminada del deporte. Marler, quien juega para los Harlequins, expresó su opinión a través de las redes sociales, afirmando: “Hay que eliminar el haka, es ridículo”, lo que provocó una avalancha de comentarios y reacciones en línea.
El jugador de 34 años continuó su crítica, señalando que “solo sirve de algo cuando los equipos responden de algún modo, como hicieron los chicos la liga pasada”, en referencia a un reciente enfrentamiento entre Samoa, donde los locales respondieron al desafío con una muestra de valentía similar. Estas declaraciones no pasaron desapercibidas y le valieron a Marler una ola de mensajes de odio e insultos en las plataformas digitales, lo que lo llevó a desactivar temporalmente su cuenta en X (anteriormente conocido como Twitter).
Al regresar a la red social, Marler intentó calmar las aguas con un mensaje conciliador, afirmando: “El contexto lo es todo, simplemente me estaba divirtiendo un poco tratando de despertar el interés en el gran encuentro de rugby. Hay algunas respuestas alocadas, mucho amor”. Sin embargo, sus palabras parecieron avivar aún más el debate. La comunidad neozelandesa interpretó sus comentarios como una falta de respeto hacia su cultura ancestral. En respuesta, el ministro de Deportes de Nueva Zelanda, David Seymour, criticó el tono sarcástico de Marler, diciendo: “¿Quién es ese Marler? Nunca he oído hablar de él. En mi carrera he conocido a algunos pilares de alto coeficiente intelectual, pero muy poco… tal vez sea solo él”.
Es importante destacar que la controversia en torno al haka no es nueva. Esta danza, que originalmente se utilizaba como un grito de guerra, ha evolucionado hasta convertirse en un signo de hospitalidad, aunque ha sido cuestionada en otras ocasiones. Principalmente, las reglas del rugby prohíben que los oponentes crucen la línea media mientras los neozelandeses ejecutan el haka. En 2019, Nueva Zelanda fue multada por violar esta norma en la semifinal de la Copa del Mundo, cuando otros jugadores ingleses cruzaron la línea en un intento visual que salió del protocolo establecido. Bajo la dirección de Eddie Jones, entonces entrenador de los ingleses, se aseguró que la acción fue para demostrar que estaban “preparados para cualquier cosa”. En las imágenes de la transmisión oficial, se pudo ver cómo seis integrantes del equipo pararon en el campo haciendo una forma de “V” en la mitad de la cancha. Aunque los árbitros advirtieron sobre el momento, hicieron caso omiso a las indicaciones.
En el pasado, durante los enfrentamientos de la final de la Copa del Mundo de 2011, Francia recibió una sanción por formar una flecha frente a los neozelandeses, lo que ilustra cómo el haka sigue siendo un tema de debate en el deporte internacional. En este contexto, el partido en Twickenham será observado rigurosamente, ya que se espera que el ritual esté presente. Además, el jugador de Eastbourne decidió retirarse de la concentración inglesa por “motivos personales” y no participará en este crucial partido.
