SAG activa protocolos tras detección de once casos de anemia infecciosa equina en tres regiones del país

SAG alerta sobre brote de anemia infecciosa equina: mortal y sin tratamiento.
SAG alerta sobre brote de anemia infecciosa equina: mortal y sin tratamiento.

El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) ha emitido alertas y protocolos tras la identificación de once casos de anemia infecciosa equina (AIE) en tres regiones del país durante el año 2025, lo que ha llevado a la decisión de sacrificar a los animales afectados.

La entidad ha señalado en su sitio web que “la anemia infecciosa equina es una enfermedad grave que afecta exclusivamente a caballos, yeguas, burros y mulas. No existe cura, vacuna ni tratamiento, y puede provocar síntomas severos que incluso pueden resultar mortales. Los equinos que logran sobrevivir se convierten en portadores, lo que incrementa el riesgo de contagio a otros animales”.

Es importante destacar que esta enfermedad no tiene impacto en la salud humana ni en otras especies de animales. Según el SAG, la AIE se transmite entre équidos a través de la picadura de insectos o mediante el uso de objetos contaminados con sangre infectada, como agujas o instrumentos cortantes.

En mayo de 2024, el SAG había informado sobre un brote de anemia infecciosa equina en 16 caballos del Club Hípico de Santiago. Siguiendo los protocolos establecidos, los animales fueron sacrificados y se implementó una cuarentena total en el recinto. Además, se llevó a cabo la desinfección de las instalaciones y se realizó un monitoreo epidemiológico tanto en el lugar como en el país. Después de cinco meses de trabajo, el brote fue erradicado por completo.

No obstante, las alarmas del SAG se activaron nuevamente tras la detección de un nuevo caso el 31 de diciembre de 2024 en la región Metropolitana. Desde entonces, se han reportado otros diez casos en diferentes regiones.

En una conversación con Las Últimas Noticias (LUN), Carlos Orellana, jefe de la División de Protección Pecuaria del SAG, explicó que “cuando se detecta, la medida sanitaria que corresponde es el sacrificio de los animales infectados, porque los sobrevivientes se convierten en portadores crónicos y pueden seguir contagiando”.

Orellana también mencionó que “en nuestro país podemos decir que la causa principal está relacionada con malas prácticas, como compartir instrumental contaminado entre animales”. Además, añadió que “hay que considerar que el cambio climático podría modificar esta condición, pero hoy no hemos detectado que la enfermedad se transmita por vectores”.

Respecto a los síntomas que presentan los equinos infectados, Orellana indicó que “un animal con anemia sufre un decaimiento generalizado, lo que impacta su capacidad de trabajo o rendimiento en competencias. Puede presentar cansancio extremo e, incluso, la muerte”.

El llamado del jefe de la División de Protección Pecuaria es a no exponer a los caballos innecesariamente y a estar atentos a su estado de salud.