
Las expectativas laborales han evolucionado hacia un enfoque en el bienestar, la flexibilidad y el desarrollo profesional.
En la actualidad, el enfoque de los trabajadores hacia el empleo ha cambiado significativamente, alejándose de la búsqueda de un salario elevado como el único factor determinante. Esta transformación, que comenzó antes de la pandemia de Covid-19, se ha intensificado debido a las nuevas realidades laborales que han surgido. Según un estudio realizado por Page Personnel, una consultora global en recursos humanos, los empleados ahora priorizan una experiencia de vida enriquecedora en lugar de simplemente un trabajo. Este cambio de paradigma se refleja en la creciente importancia que se otorga al equilibrio entre la vida personal y profesional, al desarrollo profesional y a la salud mental de los trabajadores.
El informe de Page Personnel destaca que, además de la adopción de esquemas de trabajo híbrido y remoto, que han demostrado aumentar la productividad de las empresas y el compromiso de los empleados, los trabajadores buscan organizaciones que se alineen con sus valores y principios. Esto implica que las empresas deben ser coherentes en sus discursos y acciones, especialmente en sus campañas de comunicación. Asimismo, se subraya la importancia de las jerarquías flexibles, que permiten la formación de equipos dinámicos que se reorganizan tras la finalización de proyectos, así como la necesidad de líderes que fomenten el desarrollo de sus colaboradores y reconozcan sus aportaciones.
El estudio también menciona que los beneficios competitivos y atractivos, así como los planes de carrera y un trato justo en las decisiones relacionadas con el crecimiento profesional, son aspectos que los trabajadores consideran prioritarios. Emilio Beteta, director de Estrategia de Codifin, agencia de reclutamiento especializado, señala que “cada vez son más los estudios que se hacen en torno a estos temas”. Por ejemplo, un estudio de Deloitte indica que el 77% de la fuerza laboral considera que el equilibrio entre la vida personal y laboral es fundamental, mientras que el 87% de los millennials prefiere trabajar en empresas cuyos valores coinciden con sus propias creencias. Además, el 94% de los empleados se muestra dispuesto a permanecer más tiempo en una empresa que invierte en su desarrollo.
En este contexto, una encuesta realizada por HR Connect, una comunidad de recursos humanos en América Latina, reveló las preferencias laborales de más de 8,000 personas. Los resultados muestran que el 93% de los encuestados prefiere empleos que ofrezcan oportunidades de carrera rápida, el 89% valora la diversidad en el lugar de trabajo y el 86% prefiere un jefe que los involucre en la toma de decisiones. También se observó que un mayor porcentaje de hombres que de mujeres prefiere trabajar en entornos altamente competitivos (52% frente a 30%), así como en ambientes donde se requiera un enfoque más racional que emocional (60% frente a 42%). Además, el 70% de los hombres prefiere resolver problemas complejos, en comparación con el 52% de las mujeres.
En cuanto a las diferencias generacionales, el 66% de los baby boomers busca empleos donde se espera que permanezcan más de diez años, mientras que el 56% de los millennials prefiere trabajar en lugares que valoren la formación continua y los posgrados. Beteta también menciona que, según investigaciones realizadas, “después del salario, los planes de capacitación y desarrollo son el tema de mayor prioridad al momento de buscar trabajo o decidir permanecer en una empresa”. Un estudio de McKenzie y LinkedIn indica que las empresas que invierten en la capacitación de sus empleados experimentan un aumento del 218% en los ingresos por empleado en comparación con aquellas que no lo hacen.
Metro World News entrevistó a Salvador de Antuñano, Director de Recursos Humanos de Adecco México, para profundizar en estas tendencias. En la entrevista, se abordó cómo la pandemia ha cambiado las expectativas laborales. De Antuñano afirmó que “la pandemia del Covid-19 fue un parteaguas, sobre todo en cuestiones relacionadas con el trabajo a distancia”. Aunque hay profesiones que requieren presencia física, el teletrabajo ha ganado una relevancia inesperada. A pesar de que el salario sigue siendo un factor importante, su peso ha disminuido en la decisión de aceptar o permanecer en un empleo, ya que los trabajadores buscan un paquete de compensación que incluya bienestar, salud mental, flexibilidad y calidad de vida.
En relación a la gestión de recursos humanos, De Antuñano comentó que las empresas deben ver la diversidad generacional como una ventaja, ya que cada generación aporta fortalezas únicas a la organización. La diversidad en el entorno laboral promueve un sentido de pertenencia, lo que a su vez aumenta el compromiso y la proactividad de los empleados. Es fundamental que las organizaciones reflejen la diversidad de la sociedad en su interior y que, aunque existan diferentes expectativas por generación, se ofrezcan beneficios estándar y opciones flexibles que se adapten a las necesidades específicas de cada grupo.
Finalmente, se describen las características generales de las cuatro generaciones presentes en el ámbito laboral:
– **Baby Boomers** (nacidos entre 1946 y 1964): Muchos están en proceso de jubilación, pero otros desean seguir activos. Buscan aprender y valoran su trabajo. Se sienten motivados por el prestigio y el reconocimiento.
– **Generación X** (1965-1979): Se enfocan en los resultados y buscan un equilibrio entre trabajo y vida personal. Son adaptables y valoran el aprendizaje y el crecimiento.
– **Millennials** (1980-1995): Crecieron en un entorno de cambios constantes y valoran las oportunidades de crecimiento a mediano plazo. Buscan reconocimiento y planes de desarrollo.
– **Centennials**: Nativos digitales que luchan por causas sociales y buscan empleos que les ofrezcan autonomía y alineación con sus valores. Son rápidos para aprender y adaptarse.