
La exparticipante de “Gran Hermano”, Camila Andrade, ha generado controversia tras sus declaraciones sobre su salud mental en el podcast “Damas primero”. En este espacio, Andrade admitió que los mensajes negativos que ha recibido, especialmente en relación con su supuesta implicación en la separación de Carla Jara y Francisco Kaminski, han tenido un impacto significativo en su bienestar emocional. “Es súper fácil tomar el camino corto, indeseado, negativo de tu vida”, expresó Andrade, quien también mencionó la posibilidad de caer en una depresión prolongada, afirmando que podría “dejar de vivir o quedarte en una depresión endógena eterna”.
Reacciones a las declaraciones de Camila Andrade
Las palabras de Camila Andrade no pasaron desapercibidas y fueron objeto de críticas por parte de Daniela Aránguiz, quien se pronunció en el programa “Sígueme”. Aránguiz no dudó en calificar de “súper peligroso” que Andrade sugiriera que una de sus opciones podría haber sido quitarse la vida, especialmente en un contexto donde la salud mental de los jóvenes es un tema delicado. “Encuentro súper peligroso, sobre todo por cómo está la adolescencia, que ella diga que una de sus opciones podría haber sido quitarse la vida y después ‘tirar dos pasitos para atrás'”, comentó Aránguiz.
La influencia de las figuras de reality en la juventud
Daniela Aránguiz también hizo hincapié en la responsabilidad que tienen las figuras de reality, como Camila Andrade, al ser seguidas por un público joven. “Sobre todo cuando eres una chica reality, porque eso la gente no la reconoce como comunicadora, sino que como una chica reality y de los escándalos”, indicó. Aránguiz subrayó que las adolescentes son un público que sigue a estas figuras, lo que aumenta la responsabilidad de sus mensajes.
La salud mental y la responsabilidad en el discurso público
Aránguiz continuó su crítica, afirmando que “a las chicas realitys las siguen las adolescentes y encuentro que ahí te equivocaste, y te equivocaste feo”. Además, mencionó que Andrade había compartido anteriormente que había dejado de consumir alcohol y que estaba tomando medicamentos para la depresión, lo que añade una capa de complejidad a su situación. “No sé si se acuerdan hace tiempo atrás yo les conté que a Camila la sacan para pautearla e incluso en las fiestas ella dejó de tomar trago, y lo que ella dijo es que ella estaba tomando pastillas para la depresión, que le había venido más fuerte, entonces también hay que ser responsables y sí, podría sufrir una depresión”, concluyó Aránguiz.
Las declaraciones de Camila Andrade y las reacciones que han suscitado reflejan la importancia de abordar la salud mental con sensibilidad y responsabilidad, especialmente en el contexto de figuras públicas que influyen en la juventud.