La segunda noche del Festival de Viña del Mar 2025 estuvo marcada por la actuación de Daniela ‘Chiqui’ Aguayo, quien se presentó como la humorista principal del evento. La comediante cautivó al público de la Quinta Vergara con una rutina que giró en torno a su reciente experiencia como madre, incorporando un estilo humorístico que resonó con los asistentes y televidentes.
Uno de los momentos más destacados de la noche fue cuando Aguayo dirigió un mensaje a Alberto Plaza, expresando: “Mira, con todo respeto, Alberto Plaza, ándate a la chucha”. Esta declaración provocó risas y reacciones inmediatas entre el público, convirtiéndose en un tema de conversación en redes sociales.
Desafío de la lengua de señas
Un aspecto que llamó la atención de los televidentes fue la habilidad de la traductora de lengua de señas, quien logró seguir el ritmo acelerado de Aguayo durante su actuación. La rapidez con la que la comediante se expresaba representó un verdadero desafío, pero la traductora demostró una notable destreza al mantener el paso, lo que fue ampliamente elogiado en plataformas como X (anteriormente conocido como Twitter).
Reacciones en redes sociales
Los comentarios en redes sociales reflejaron la admiración por la traductora. Un usuario destacó: “Qué show aparte es la lengua de señas en la rutina de Chiqui Aguayo, sobre todo a la velocidad que ella habla. La encuentro notable”. Otros usuarios también compartieron su asombro, mencionando la habilidad de la traductora para interpretar con precisión y emoción.
Algunos de los comentarios en redes incluyeron:
– “La traductora de lengua de señas que le pusieron a Chiqui Aguayo es sequísima! Amo como la acompaña con toda la gama y matices de emociones que le pone la Chiqui”.
– “Traductora lenguaje de señas en velocidad 5.0 terminará con tendinitis… Chiqui Aguayo”.
– “Lo mejor fue la traductora de señas interpretando a la chiqui #Viña2025”.
La actuación de Aguayo y la interpretación de la traductora de lengua de señas se convirtieron en un tema central de la noche, destacando la importancia de la accesibilidad en eventos de gran magnitud como el Festival de Viña del Mar. La habilidad de la traductora para seguir el ritmo de Aguayo fue un punto de admiración, con muchos espectadores comentando que parecía que iba a perder peso por la intensidad de su trabajo.
La presentación de Chiqui Aguayo en el Festival de Viña del Mar 2025 no solo fue un espectáculo de comedia, sino también un ejemplo de cómo la inclusión y la accesibilidad pueden ser parte integral de la experiencia del público.
