¿Por qué el cielo nocturno sigue oscuro si hay tantas estrellas? La paradoja de Olbers lo explica

El espacio parece oscuro a pesar de las estrellas: descubre la razón detrás de este misterio.
El espacio parece oscuro a pesar de las estrellas: descubre la razón detrás de este misterio.

La oscuridad del cielo nocturno, a pesar de la abundancia de estrellas, ha sido objeto de estudio y reflexión a lo largo de la historia. La paradoja de Olbers, formulada por el astrónomo Heinrich Wilhelm Olbers en 1820, plantea un enigma fascinante: si el universo es eterno y estático, ¿por qué no vemos un cielo completamente iluminado por la luz de innumerables estrellas? Esta cuestión invita a profundizar en la naturaleza del cosmos y en las propiedades de la luz que emiten los astros.

La paradoja de Olbers

La paradoja de Olbers se basa en la premisa de que, en un universo estático y eterno, la cantidad de estrellas debería ser tan vasta que su luz debería llenar el cielo nocturno. Sin embargo, la realidad es que, cada noche, el firmamento se presenta oscuro y sin un brillo uniforme. Este fenómeno ha intrigado a científicos y filósofos por generaciones, llevando a la búsqueda de respuestas que expliquen esta aparente contradicción.

Explicación del Dr. Alejandro Farah Simón

El Dr. Alejandro Farah Simón, astrónomo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ofrece una explicación fundamental para entender por qué el cielo nocturno no se ilumina a pesar de la presencia de innumerables estrellas. Según el Dr. Farah, el universo no es estático; por el contrario, está en constante expansión. Este fenómeno implica que todas las estrellas y galaxias se están alejando unas de otras, lo que da lugar a un efecto conocido como “corrimiento al rojo”.

El corrimiento al rojo

El corrimiento al rojo se refiere al cambio en la longitud de onda de la luz emitida por los astros lejanos. A medida que estas estrellas se alejan, la luz que emiten se desplaza hacia longitudes de onda más largas, lo que resulta en una disminución de su energía. Este proceso transforma la luz visible en luz infrarroja y microondas, que son invisibles para el ojo humano. Por lo tanto, aunque el universo esté repleto de estrellas, la luz que emiten no siempre es detectable por nosotros.

Factores adicionales que contribuyen a la oscuridad del cielo

Además del corrimiento al rojo, existen otras razones que explican por qué el cielo nocturno no se ilumina. En primer lugar, hay estrellas que se encuentran a distancias tan enormes que la luz que emiten aún no ha llegado a la Tierra. Este fenómeno se debe a la vastedad del espacio y al tiempo que la luz tarda en viajar a través de él.

En segundo lugar, el espacio no es un vacío absoluto. Está compuesto por gas y polvo, conocidos como el medio interestelar, que pueden absorber parte de la luz en su trayecto hacia nuestro planeta. Esta absorción de luz también contribuye a que el cielo nocturno no se vea tan brillante como podría esperarse.

La combinación de estos factores —la expansión del universo, el corrimiento al rojo, la distancia de las estrellas y la presencia de materia en el espacio— proporciona una comprensión más clara de por qué, a pesar de la multitud de estrellas, el cielo nocturno permanece oscuro.