
La implementación de nuevas asignaturas relacionadas con la cultura indígena en los colegios ha generado un gran interés y debate en el ámbito educativo chileno. A partir de este año, se ordena la inclusión de las asignaturas “Lengua y Cultura de Pueblos Originarios Ancestrales” para estudiantes de primero a sexto básico, y “Sector de Lengua Indígena” para séptimo y octavo básicos, en aquellos establecimientos que cumplan con ciertos criterios de matrícula.
Detalles de la implementación
Esta medida fue comunicada el 5 de diciembre de 2024 a todos los secretarios regionales ministeriales (seremis) del país a través de la División de Educación General (DEG). Se enmarca dentro de la Ley Indígena N°19.253 y se aplicará a los colegios que tengan un 20% o más de estudiantes pertenecientes a los pueblos Aymara, Mapuche, Quechua y Rapanui, así como a aquellos que cuenten con al menos un estudiante de las etnias Colla, Diaguita, Lickanantay, Kawésqar y Yagán. Esta normativa afecta a todos los tipos de escuelas, incluyendo públicas, subvencionadas y particulares.
El Ministerio de Educación ha identificado un total de 3.088 centros educativos que deberán implementar estas asignaturas, lo que representa aproximadamente una cuarta parte de los doce mil colegios existentes en el país. La identificación de los estudiantes de origen indígena en cada establecimiento se basa en datos de las becas educacionales indígenas, el Registro Social de Hogares y la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi).
Ejemplos de implementación en la Región Metropolitana
En la Región Metropolitana, la seremi ya ha notificado a 50 escuelas, colegios y liceos sobre la obligación de impartir estas asignaturas. Entre los establecimientos mencionados se encuentran los municipales Carmela Carvajal y Liceo Lastarria, ambos ubicados en Providencia, así como Amanda Labarca en Vitacura y Augusto D’Halmar y Lenca Franulic en Ñuñoa. También se incluyen colegios particulares como Saint Gabriel’s College y Andree English School.
Opiniones de expertos sobre la medida
La decisión del Ministerio de Educación ha suscitado diversas opiniones entre académicos y expertos en educación. Carmen Gloria Garrido, directora de la Escuela de Educación de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Andrés Bello, considera que la implementación de estas asignaturas es positiva, ya que permite a las nuevas generaciones apreciar diferentes cosmovisiones e identidades. Según Garrido, esto les ayudará a entender mejor varios aspectos de la vida cotidiana, afirmando que “se trata de volver al pasado para entender el presente, valorando y profundizando nuestra cultura y nuestras diferencias”.
Por otro lado, Rodrigo Fuentealba, decano de la Facultad de Educación de la Universidad Autónoma, plantea interrogantes sobre la viabilidad de la propuesta, señalando que el currículum nacional ya está sobrecargado de demandas. Fuentealba sostiene que “el diagnóstico compartido entre los especialistas es que el currículum nacional está sobrecargado de demandas, y como tal, resulta ineficaz”. Además, enfatiza que es prioritario fortalecer habilidades fundamentales antes de integrar nuevos contenidos.
Declaraciones del Ministro de Educación
El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, se refirió a la implementación de estas asignaturas, afirmando que “esto no es nuevo” y que las asignaturas son obligatorias desde el año 2021, basadas en bases curriculares aprobadas entre 2019 y 2020. Cataldo destacó que el sistema educativo ha tenido la obligación de adaptarse a esta realidad desde 2021 y que el Ministerio ha estado trabajando en la formación de educadores para impartir estas asignaturas.
El ministro también hizo un llamado a reflexionar sobre la importancia de cuidar el patrimonio cultural y reconocer a los pueblos originarios, asegurando que estas asignaturas no deberían afectar la formación en áreas fundamentales como el lenguaje, matemáticas, ciencias e historia, ya que son parte de una educación integral.