Matrimonio que no creía en las vacunas murió de Covid

Lydia y Lawrence Rodriguez fallecieron con tan solo días de diferencia, pidiendo vacunarse cuando ya era tarde.

Lydia y Lawrence Rodríguez no creían en las vacunas
Lydia y Lawrence Rodríguez no creían en las vacunas.

La historia del matrimonio de Lydia y Lawrence Rodriguez ha remecido a Estados Unidos. La pareja de Galveston, Texas, falleció luego de contagiarse con COVID-19, tras haberse negado a recibir la vacuna.

Ambos se contagiaron del virus junto a sus cuatro hijos luego de haber asistido a un campamento de su iglesia. No le informaron a nadie sobre su contagio hasta que Lydia, de 42 años, fue llevada al hospital por su marido, Lawrence, de 49, el 12 de julio, después de que empezara a sentir falta de aire. La mujer fue internada en la UCI, mientras que él fue hospitalizado en otra sala.

Ambos se encontraban en contra de las vacunas y se habían negado a recibir la primera dosis. Lydia nunca ha creído realmente en las vacunas”, declaró Dottie Jones, prima de la afectada, al medio The Post“Ella creía que podía manejar todo por sí misma, que realmente no se necesitaba la medicina”, agregó.

El estado de salud de Lawrence Rodríguez empeoró durante su estadía en el hospital, por lo que también tuvo que ser trasladado a la UCI. El hombre solicitó ser vacunado en contra del coronavirus poco antes de que le pusieran un respirador, pero ya era demasiado tarde. Lawrence falleció el pasado 2 de agosto, mientras Lydia luchaba por su vida a tan solo unas habitaciones de distancia.

Lydia y Lawrence y millones que siguen sin vacunarse

Lydia dependía por completo de un ventilador, y en su última llamada le pidió a su prima Dottie:“Por favor, asegúrate de que mis hijos se vacunen”. Ella también había pedido la aplicación de la vacuna antes de tener que usar el respirador.

Tristemente, ella también falleció, el 16 de agosto. “Sabía que nunca se vacunaría”, dijo Dottie a The Post. “Estaba muy preocupada”, añadió.

La familia ha creado una recaudación de fondos en línea para ayudar a sus hijos mientras los tribunales resuelven quién se convertirá en el tutor de los menores. Ninguno de los cuatro está vacunado, aunque están preparándose para hacerlo.

Lydia, Lawrence, y sus hijos se encontraban entre los millones de estadounidenses que aún no han recibido al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus, la cuál disponible de forma gratuita para cualquier persona mayor de 12 años.

Las autoridades sanitarias a nivel mundial han subrayado que la vacuna reduce significativamente las posibilidades de enfermar gravemente o morir a causa del virus, tal como lo hizo el matrimonio.