
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, enfrenta acusaciones de soborno y fraude por aceptar contribuciones ilegales durante su campaña de 2021.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, ha sido acusado de soborno y fraude en el contexto de una investigación federal sobre corrupción. La acusación, que fue ampliamente divulgada el miércoles por la noche y se hizo pública el jueves por la mañana, sostiene que Adams aceptó contribuciones ilegales de ciudadanos extranjeros para su campaña electoral a la alcaldía en 2021. Los cargos fueron presentados por la oficina del fiscal de Estados Unidos en Manhattan, Damian Williams.
Según los fiscales federales, Adams, quien ha estado en el cargo desde 2021, aceptó beneficios indebidos durante casi una década, comenzando desde su tiempo como presidente del distrito de Brooklyn. Entre los beneficios mencionados se incluyen viajes internacionales de lujo proporcionados por empresarios extranjeros y al menos un funcionario del gobierno turco que buscaba influir en él. Los fiscales han detallado las relaciones inapropiadas que supuestamente mantuvo Adams con un diplomático turco, incluyendo la aceptación de pasajes en clase ejecutiva para él y sus acompañantes en vuelos a destinos como China, Francia, Hungría e India, así como estancias en hoteles con descuentos significativos.
La acusación contra Adams es notable, dado que es apenas el segundo alcalde negro en la historia de más de 400 años de la ciudad. Adams, de 64 años, ha manifestado su intención de permanecer en el cargo y defenderse de las acusaciones. Sus abogados han afirmado que su propia investigación no ha encontrado evidencia de conducta ilegal por parte del alcalde. En una rueda de prensa el jueves, Adams declaró que continuará ejerciendo como alcalde y que espera poder defenderse adecuadamente.
Los fiscales han señalado que Adams explotó un programa de financiamiento público de la ciudad de Nueva York, que proporciona 8 dólares por cada dólar recaudado por donantes locales, hasta un máximo de 250 dólares para candidatos a cargos municipales. La acusación sostiene que la campaña de Adams solicitó estos fondos basándose en donaciones ilegales, lo que resultó en la recepción de hasta 2,000 dólares en fondos públicos por cada contribución. En total, la campaña de Adams recibió más de 10 millones de dólares en fondos públicos. Los fiscales alegan que Adams “tomó repetidamente medidas para ocultar la solicitud y aceptación de estos beneficios” y que no los reveló en sus declaraciones financieras anuales, como es requerido para los empleados de la ciudad de Nueva York.
La investigación liderada por Williams también se centró en determinar si la campaña de Adams se coordinó con el gobierno turco para recibir donaciones ilegales. Además, se indagó si el alcalde presionó a los bomberos de la ciudad para que aprobaran permisos para la construcción de un nuevo consulado turco, a pesar de que existían problemas de seguridad, según reportes de The New York Times. En febrero, se hizo pública una segunda investigación federal que amplió el círculo de asociados de Adams. Los agentes federales incautaron dispositivos móviles de Adams el 6 de noviembre de 2023, aunque el alcalde no tenía consigo su teléfono personal en ese momento.
Los fiscales han afirmado que Adams entregó posteriormente su teléfono personal, el cual utilizó para comunicarse sobre las conductas descritas en la acusación. Sin embargo, alegó que “había olvidado” la contraseña para desbloquearlo, lo que complicó el acceso del FBI al contenido del dispositivo. La acusación es detallada y menciona un viaje en agosto de 2017, durante el cual Adams y un familiar aceptaron una “estadía con grandes descuentos” en el hotel St. Regis de Estambul, propiedad de una empresaria turca que intentó congraciarse con él. Adams se alojó en la “Suite Bentley”, que tenía un costo de 7,000 dólares, pero pagó solo 600 dólares.
Además, se menciona que un funcionario turco le indicó a Adams en septiembre de 2021 que era “su turno” de recompensarle, instándolo a presionar a los funcionarios del Departamento de Bomberos de Nueva York para que permitieran la apertura de un nuevo edificio de 36 plantas del consulado turco, sin realizar una inspección de incendios, antes de una visita del presidente turco. Adams ha enfatizado que las investigaciones no son una distracción y ha expresado su compromiso de continuar dirigiendo la ciudad, a pesar de las acusaciones en su contra.